Seres tardamente evolutivos es que somos, con la capacidad de destruir lo que nuestras manos construyen cada día y capaces de retroceder acáridamente con ideas imaginarias provocadas por este materialismo que asfixia una realidad alterada por el gobierno del hombre hacia el mismo humano.
Y si mi vida continua como todos quieren que sea entonces de nada serviría aquella libertad que en un monte se proclamo, no se trataría de vivir por vivir como obligación social sino disfrutar lo dado entre cada mano.
Sera costumbre humana ser imitadores falsos de actos vacios de una identidad propia, porque diseño original no es de cada uno tropezar de la misma forma que el de enfrente y desear lograr la misma vida tan llena de nada, si hemos de aprender a coexistir en medio de esta selva no será por fuerza propia sino la falsa ayuda de alguien más para la manipulación de ideas.
El camino construido va por seres añadidos a la historia que simplemente supieron ver la mitad de la moneda pagada y lanzada a raíz del los años difíciles que cada uno guarda al archivo personal de experiencias difíciles.
Un cuarto de milla de vida es lo unico que tenemos, entonces arriesguemos cada mañana estrellarnos a esa felicidad que nuestra alma espera y necesita.
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